arrow-circle-down arrow-circle-left arrow-circle-up arrow-down arrow-left arrow-line-right arrow-right arrow-up ballon close facebook filter glass lock menu phone play point q question search target twitter
X

¿Es peor el remedio que la enfermedad? CIUDAD BOLARDO estudia la posibilidad de recuperar como solar el vacío urbano generado por los bolardos en el entramado de las calles de Madrid.

El bolardo empezó a usarse en el centro como parche para evitar la invasión de las aceras por parte de vehículos de conductores poco considerados. Esta barrera delimita con violencia el ámbito del coche y del peatón en la calle, dando al automóvil la sensación de prioridad y desplazando al viandante a estrechas aceras invadidas por toda clase de obstáculos. La actual existencia del Servicio de Estacionamiento Regulado y del trabajo que realizan sus controladores, así como la existencia de otras zonas de coexistencia coche-peatón -tanto en varias ciudades de Europa, como en la misma ciudad de Madrid-, permiten replantear la necesidad y oportunidad del bolardo. Sospechamos, y por eso este trabajo, que a día de hoy, la política de implantación de bolardos no solo no supone un beneficio para el peatón sino que es un obstáculo y genera un gran desaprovechamiento del espacio público en nuestra ciudad.

El área de influencia de un bolardo resulta ser de casi 1 m2 entendiendo que no solo ocupa su sección sólida sino además un radio de acción por donde el peatón no pasa nunca o quizás muy de vez en cuando. Centrando el análisis en el área de estudio de la zona de Pez-Luna se contabilizan un total de 3.304 bolardos que generan un vacío urbano de 2.974 m2, que viene a ser lo que ocupa un campo de futbol 7 o la propia plaza Luna, Soledad Torres Acosta. Desde nuestro punto de vista 2.974 m2 útiles es mucho espacio público desaprovechado. Si hacemos un juego, y calculamos el precio de este área en la zona centro de Madrid -según el portal idealista en septiembre de 2009 el m2 vale 4.168 euros/m2-, obtenemos que el espacio que ocupan los bolardos en la zona de Pez-Luna cuesta doce millones de euros. ¿No parece mucho doce millones de euros para unos bolardos? ¿Y si este espacio se lo devolvemos a la ciudad y empezamos a pensar el espacio público de otra manera?

El proyecto que planteamos desde el estudio UNTERCIO consiste en la reconsideración de los elementos presentes en las calles y en el planteamiento de proyectos-calle. La primera acción necesaria para mejorar arquitectónicamente la calle es la eliminación del bolardo en el centro de Madrid, empezando por la zona de Pez-Luna. Además, este es un proyecto de coste cero, donde el reciclaje del hierro fundido de los bolardos compensa los gastos de su retirada y de la reparación de pavimento. Hacer que el centro de la ciudad de Madrid funcione mejor “no cuesta nada”.

  • Información
  • Autoría

    Clasificación / Tipología

    -

    Ubicación

    28013 madrid
    MADRID | ESPANYA

Galería realización

Participaciones en arquia / próxima

V Edición 2014-2015
IV Edición 2012-2013
III Edición 2010-2011