Con la presente actuación se satisface el programa de necesidades que habilita al local intervenido a funcionar como hotel de tres estrellas.

Este hotel está ubicado en la localidad de Tirgo, en la Rioja, en una casona de piedra cuya fachada responde a modelos del siglo XIX cimentada sobre una roca arenisca que alberga dos calados del siglo XVIII.

Forma parte de un complejo de edificios y espacios no edificados destinados a un negocio de restauración y a almacenaje de maquinaria de actividad agraria.

El criterio básico de la intervención ha sido la optimización de la dimensión a planta del edificio para conseguir 10 habitaciones (algunas de ellas con salón y dos suites), así como espacios complementarios propios de este tipo de edificios.

En contraposición con el criterio conservacionista seguido para la fachada (siguiendo los dictámenes del Consejo de Patrimonio de La Rioja) en el interior se ha buscado un lenguaje actual mediante la utilización de materiales vanguardistas y recursos espaciales como la triple altura que conecta todas las plantas a través de la escalera.

Además de la reconstrucción de la totalidad de los espacios interiores (en colaboración con el interiorista Santiago Sáenz Samaniego), se ha actuado sobre la fachada y los espacios exteriores adyacentes al edificio. Para la definición de estos espacios, se ha trabajado en colaboración con el escultor José Antonio Olarte, una de cuyas obras preside y da carácter el jardín posterior del edificio.