Ángela es una muchacha de origen humilde cuyo hermano, Antonio, es un famoso bandolero. La chica se casa con Gaspar, el hijo de un aristócrata, pero no se atreve a decirle quién es su hermano. Al final, el bandolero mata al suegro de su hermana, y él también pierde la vida en manos de otro familiar. Ángela también muere dejando un hijo que no quiere ser reconocido por su padre, Gaspar. El cura del pueblo será quien se ocupe de la educación del pequeño y de hecho, será su protector durante toda su vida, ya que Gaspar continúa sin querer saber nada de él.
Melodrama basado en un folletín homónimo de Enrique Pérez Escrich (autor de historias de gran aceptación popular) de la que ya se hizo una adaptación muda en 1927. Diez años después CIFESA retomó la historia para hacer una de las películas religiosas más características de la época de la República, a la que algunos han calificado incluso de ‘panfleto clerical’. El filme contó con un amplio presupuesto (sólo hay que fijarse en su cuidada ambientación) y con uno de los más prestigiosos directores de cine mudo, Francisco Camacho.
Decorados del arquitecto Jose Iribarren y del escenógrafo Tadeo Villalba
