Al investigar la biografía de John Cage, se descubre que en su vida tuvieron especial relevancia los intercambios intelectuales con arquitectos (trabajó con Erno Goldfinger, vivió por temporadas en la casa de Rudolph y Puline Schindler, estuvo obsesionado con Mies van der Rohe y Buckminster Fuller…). No sólo estos intercambios de ideas, sino el impacto de una sensación espacial o la atmósfera de un edificio en el compositor, están ampliamente recogidos en los escritos autobiográficos y la correspondencia, y tuvieron un impacto relevante en sus planteamientos artísticos.

La reciente publicación de la correspondencia completa del compositor (The Selected Letters of John Cage, 2016) arroja nueva luz sobre algunas de las intuiciones de esta relevancia del contacto con el mundo arquitectónico. La posibilidad que brinda esta beca de residir en Nueva York y poder visitar asiduamente los archivos del John Cage Trust, alojado por el Bard College de Nueva York y disponible para todo aquel interesado en la materia, contribuiría a profundizar y dotar de rigor documental estas intuiciones y referencias arquitectónicas en la vida de Cage con el objetivo final de avanzar el manuscrito de un ensayo más extenso sobre esta relación Cage-arquitectura.