Lugar: un contexto urbano poco denso de casas individuales con sus jardines que acogen muchas veces pequeñas construcciones anexas (garajes, cobertizos,…).

Programa: la casa existente resulta de la adición de dos volúmenes; la familia que la habita ya utiliza todo el espacio disponible y se plantea ampliar la casa y repensar el uso de algunos espacios.

Pabellón: nuestra voluntad es la de presentar esta ampliación como un pabellón, una construcción ligera a medio camino entre la casa y el jardín. Con este fin escogemos unas técnicas de construcción que se distinguen claramente de las empleadas para la casa: a los muros perforados por ventanas contraponemos un ritmo generado por la estructura y soporte de los elementos de cerramiento. La ampliación se convierte en un activador de nuevas relaciones entre los espacios de la casa existente.

Estructura y sistema de fachada: el pabellón se compone de dos estructuras asociadas a cada uno de los dos niveles de la casa. La primera, a cota del jardín, es una estructura de hormigón compuesta de dos pórticos que vuelan en sus extremos, resolviendo por una parte la relación con la casa existente y por otra, la proyección del pabellón hacia las vistas.

La segunda estructura, situada en la cota principal de la casa, es un entramado de madera que no se apoya sino que se ancla lateralmente a las jácenas de hormigón. La repetición de un mismo pórtico conforma el espacio de estar que se prolonga desde el interior hacia el exterior.

Estos pórticos son el soporte de los bastidores que permiten alternar cerramientos de vidrio y paneles de madera de abeto.

Estructura y cerramiento constituyen un sistema de fachada producido en taller que ha permitido la rapidez de ejecución de la obra.

Materiales y entorno: la casa se construye con materiales corrientes de su entorno y es a través del cuidado en el dibujo de los detalles como se les consigue dar un valor añadido.