El conjunto de 248 viviendas se localiza en el barrio de la Paz, sobre terrenos ganados al mar de la bahía de Cádiz, mirando hacia los astilleros de Puerto Real. El solar de la intervención, de planta rectangular, se extiende entre las avenidas del Guadalquivir y de la Bahía. El proyecto responde a los condicionantes urbanos y paisajísticos, ofreciendo diferentes respuestas tipológicas hacia la ciudad y hacia el mar. Hacia la avenida del Guadalquivir, ocho bloques lineales de cinco plantas, con orientación este-oeste y agrupados dos a dos, evitan ofrecer una fachada continua, apostando por una solución en manzana cerrada opuesta al modelo de edificación abierta del entorno. Cada uno de los bloques que forman la manzana se compone, a su vez, de tres grandes núcleos de viviendas que comparten las circulaciones verticales. En la avenida de la Bahía, la escala aumenta hasta las siete plantas, con una tipología de torre aislada que dibuja un nuevo perfil para la ciudad. El acceso a las manzanas se realiza desde la avenida del Guadalquivir, a través de portales recortados en los cuerpos de cierre de los patios, de tres plantas de altura, y que hacia la avenida ofrecen una fachada levemente convexa. Los patios, poblados con abundante vegetación, se enhebran como parte de los recorridos peatonales hasta las torres, con las que se alinean en una composición axial que busca intencionadamente una perspectiva monumental. Los bloques en manzana ofrecen una imagen desnuda y severa, con huecos recortados sobre el paramento enfoscado blanco. Galerías en la planta segunda recorren los edificios en toda la longitud de sus fachadas, y sobre ellos, tres balcones de hormigón armado marcan la posición de los núcleos verticales de comunicación, que en la última planta se significan en una grieta. En las dos manzanas más al norte, los bloques que dan fachada a la calle José Cadalso permiten el acceso a los portales de las viviendas desde la calle, en reconocimiento al carácter estructurante de dicha vía a nivel urbano. Este reconocimiento se evidencia, además, con el dibujo de un basamento avitolado en las dos primeras plantas. El resto de bloques vuelcan los portales hacia los patios de manzana, dejando las calles con la función exclusiva del estacionamiento. Las torres se alzan sobre un basamento de planta cuadrada, que participando de la vinculación al viario estructurante que muestran las manzanas a la calle José Cadalso, se vuelve a dibujar con un llagueado horizontal del enfoscado. A partir de la segunda planta, la torre elimina una vivienda por planta y se estiliza en las cinco últimas plantas. El remate de los castilletes de las torres se acompaña de un torreón, que hace una referencia figurativa a las torres vigía de la ciudad.